miércoles, 10 de agosto de 2016

INICIANDO


¿Cómo empezó todo?

Hace unos meses, me contactó una marca especializada en triatlón (Orca) proponiéndome participar con ellos en una prueba que tendría lugar en San Sebastián en el mes de septiembre.

Se trata del Triatlón de la Mujer, muy sencillito, ideal para alguien que nunca ha hecho una actividad parecida pero que te permite vivir la experiencia y quién sabe si empezar a dar pasitos en este deporte.

Muchos me preguntáis qué trabajo estoy haciendo para llegar preparada a septiembre: por suerte, he tenido la ayuda de Sara Carmona, una entrenadora que pasó conmigo un par de días hace unas semanas para ver mi nivel y poder hacerme un planning acorde. La lástima es que no pude trabajar la carrera porque tenía una lesión en el sóleo que poco a poco va remitiendo.

Las dos primeras semanas (ahora estoy en la segunda) consisten en coger fondo, resistencia, para lo que entreno 5 ó 6 días a la semana en los que alterno los entrenamientos de cardio con el trabajo de fuerza. Por ejemplo, el lunes hice una hora de bici de carretera, el martes trabajo de fuerza en el gimnasio, hoy he estado nadando por la mañana... y en las semanas que llegan empezará el entrenamiento algo más específico que os contaré si queréis :)

Lo más complicado del triatlón es que no basta con correr mucho, nadar bien o saber montar en bici, sino pensar que hay que hacer una cosa detrás de otra; es muy obvio pero no es lo mismo hacer una hora de bici y tumbarte en el sofá a descargar las piernas que cambiarte las zapatillas y echar a correr. Eso es lo que iré trabajando para que no me suponga un mundo.

En mi caso, tengo el problema de que aunque hago mucho deporte, me cuesta especialmente correr, primero porque es lo que más me cansa y segundo porque piso mal y he sufrido alguna lesión. Por suerte, a raíz de toda esta historia del triatlón, he hablado con un atleta que me está enseñando a corregir la pisada para poder seguir avanzando en la carrera y no tener que parar cada semana porque me he hecho daño en algún sitio. Ahora, mientras me recupero del todo de lo del sóleo, estoy haciendo ejercicios de técnica de carrera que me ayudarán a naturalizar los movimientos y por lo tanto a correr bien.

También es importante el calzado. Yo alternaba un par de modelos de zapatillas que creía muy buenos, pero Sara, la entrenadora de la que os hablé antes, me dijo que uno de ellos eran ideales para personas que corrieran muy bien pero que para alguien que empezaba podían ser perjudiciales porque tenían muy poquita amortiguación y todo el impacto se lo llevaba la pierna.

Ahora estoy esperando a que me lleguen unas zapas que he pedido específicas para pronadores (piso con la zona interna del pie al correr) y que me ayuden también a mejorar ese aspecto. Cuando las tenga subiré alguna fotito del modelo por aquí por si os interesa.

No quiero cansaros demasiado con todo esto, mejor os doy la información en pequeñas píldoras. ¡Aún tengo que contaros mi primera vez con la bici de carretera o nadando con neopreno! jajaja

Estoy recién llegada de Zapeando y me voy corriendo a hacer cositas. Bueno, corriendo no, andando, que aún estoy convalenciente XD (festival del humor)


Os mando muchos besos y gracias por dedicarme un ratito.

Irene

9 comentarios:

  1. Muchos ánimos tanto para el blog como para la competición !! Espero que te respeten las lesiones y puedas competir en el mejor estado físico posible , a ver si todas esas ayudas de tus entrenadores y las nuevas zapatillas te hacen llegar en las mejores condiciones a septiembre !! Besos !

    ResponderEliminar
  2. Yo estoy deseando hacer uno. En mi caso el problema es más bien que correr me aburre así que habrá que vencer esa barrera psicológica... menos mal que el tramo a pie es el último y tienes la motivación de que llegas a meta ajajajajaja

    ResponderEliminar
  3. Yo estoy deseando hacer uno. En mi caso el problema es más bien que correr me aburre así que habrá que vencer esa barrera psicológica... menos mal que el tramo a pie es el último y tienes la motivación de que llegas a meta ajajajajaja

    ResponderEliminar
  4. Buen blog, sigue así. :)

    ResponderEliminar
  5. Ah. Y todo eso sin tener que ir al hospital?

    ResponderEliminar
  6. Ah. Y todo eso sin tener que ir al hospital?

    ResponderEliminar
  7. Para tu problema de pisada pronadora, por mi experiencia con el mismo problema, lo mejor que puedes hacer es acudir a un podólogo especialista en el estudio de la pisada. Te aconsejo desconfiar de las zapatillas pronadoras sencillamente porque cada uno tiene un cuerpo distinto y una pisada diferente.
    Suerte y ánimo!!!

    ResponderEliminar
  8. Lo primero muchos animos Irene que seguro que lo consigues. Yo soy corredor minimaliata y corro con chanclas, sin amortiguacion. Lo importante es que independientemente devla amortiguacion de la zapatilla aprendas a amortiguar tu misma. Siempre pisa bajo tu centro de gravedad y nunca talones siempre pisa con la parte anterior del pie, eso te ahorrara muchas lesiones. Un saludo

    ResponderEliminar
  9. Genial leerte y conocer más de ti y tus rutinas! Espectacular! Me uno para acompañarte en este camino del triatlón y en lo que nos quieras seguir compartiendo!! Besos de un Venezolanl desde México!! ☺️��

    ResponderEliminar